Las vacunas son productos muy seguros y son sometidas a estudios estrictos antes de poder administrarse a la población.
El cuidado de la calidad y la seguridad de las vacunas comienzan en su proceso de investigación y desarrollo y continúan durante la producción, la autorización y la vigilancia posautorización, hasta su disposición final.
Como también sucede con los medicamentos pueden producir efectos secundarios que por lo general son leves y la mayoría son locales en la zona de administración.
En Uruguay contamos con la Unidad de Farmacovigilancia del Ministerio de Salud Pública, que se encarga de vigilar posibles efectos adversos de las vacunas y notificar los mismos.
Si tiene dudas sobre alguna vacuna y su posible contraindicación, puede consultarlo con su pediatra.